Es estas fechas, el tráfico aumenta vertiginosamente en la carretera debido a la multitud de desplazamientos que se producen por el periodo vacacional, y bien sea en fechas muy concretas como a principios mediados y finales de mes, como en el día a día por la cantidad de población que hay, sobre todo en las zonas que más turismo atraen. Por todo ello, cabe intensificar, más si cabe, las medidas de precaución. Algunas de ellas podrían ser,
Revisa tu automóvil ante de emprender viaje, sobre todo si va a ser largo, luces, neumáticos, herramientas, limpia parabrisas y retrovisores....
Descansa antes de coger el coche, no conduzcas cansado, ni excedas el tiempo de manejo adecuado que puede ser de dos horas. En cuanto sientas cansancio o sueño, detente.
Utiliza tus espejos y evita los puntos ciegos.
Circula por la derecha, usa los carriles de alta velocidad solo para rebasar a otros.
Obedece las señales de tráfico.
Mantén la distancia adecuada entre vehículos. No sigas de cerca al vehículo que está en frente de ti. No importa lo lento que vaya el tráfico, mantén al menos 2 segundos de distancia entre tu automóvil y el vehículo que está delante de ti. Si acortas la distancia, no podrás detenerte a tiempo si su conductor frena repentinamente.
Esto es especialmente importante en las horas en las que hay mucho tráfico. Quizás creas que el automóvil que está delante de ti acelera rápidamente, cuando en realidad solo avanza para detenerse nuevamente. Si no sigues de cerca a los otros automóviles, no desgastarás tanto tus frenos y ahorrarás combustible. Los procesos constantes de frenar y arrancar no son buenos para tu vehículo.
Utiliza el móvil con manos libres y si has de utilizar el teléfono, debe ser sólo para hablar, y únicamente con el manos libres. No envíes mensajes de texto ni hables por teléfono mientras conduces. Si mantienes tu atención puesta en el teléfono o en cualquier otra cosa que no sea el camino, será más probable que sufras un accidente
Respeta las normas de circulación
Da prioridad a los peatones: los viandantes son los más vulnerables entre todos los elementos que conforman la circulación, por ello debes tener especial atención no sólo en los pasos de peatones sino en general, y especialmente de noche.
No te distraigas en los atascos
No conduzcas si has bebido o consumido algún tipo de drogas o medicamento que contraindique el manejo de vehículos durante sus efectos.
No corras. El exceso de velocidad disminuye el tiempo que tienes para reaccionar e incrementa las probabilidades de sufrir un accidente
En general, evita el carril izquierdo. Es el lugar en el que ocurren la mayoría de los accidentes.[1] También tienes más "salidas" en el carril derecho, en el caso de que ocurra un problema repentino que te obligue a cambiar rápidamente de carril o detenerte en el arcén.